Paloma de la paz

Cuando te tengo cerca me siento más hombre,
me completa tu presencia y me suceden recuerdos,
espero con paciencia a que sucedan las palabras,
entonces pierdes palabras conmigo
como si no tuvieras habla,
como la niña que aún no ha aprendido a hablar
y que pronuncia palabras malas.

Admiro tu bondad prodigiosa

y me lamento por no haberla sentido

en el momento más propicio,

cuando yo necesitaba auxilio,

las coincidencias en la vida

vienen y van sin sentido.

Pero aún me agrada lo mismo,

el haberla en otras ocasiones sentido,

porque reconozco en ella

todo lo que quiero en mundo inaudito.

Inaudito porque nunca te esperas

lo que va a suceder, no está escrito.

Su bondad la tenía una paloma,

quizá la misma de Tesla,

de la que él se enamoró,

le eché migajas para que coma

y para que su paz protegiera

a todo… su amor.

La misma paloma vuela libre

y volaba por su libertad,

la alimenté siempre por eso

¿de que sirve a la paz encerrar?