A mi lectora preferida

Empiezo este poema intentando conectar con esa lectora

desde mi cuarto, sin apoyo alguno, más que el de las

letras uniéndose en mi mente formando palabras.

Respiro pensando en lo que ya he dejado escrito

y suspiro pensando en el de escribir motivo.

Ahora dicen que el rap no llega a ser poesía,

que el verso libre es demasiado libre,

que hay que oprimir al arte, y de la misma forma

que por el rock ‘n roll *vailaste

por el rap habrá gente que velara todavía.

Los poetas de la voz son los músicos con sus ofrendas,

y tú, ávida lectora, eres de esa voz la poesía,

ofrecen al oído su arte tanto como su alegría,

tu persistencia para leerlo todo hace que me sorprenda,

mas más me sorprendes tú decidida

cuando lees desde la palabra primera hasta la última letra.

Me ofreces al oído 1algo más dulce que los musicales poetas,

tu dulce voz azul añil que tiñe mi escuchar de agradables fresas,

3retoños finos verdes invaden mis pensamientos,

nuevas dulces fresas vuelven a oír mis tímidos oídos a tientas.

Tímidos porque no quieren escuchar tu voz

pero la piensan,

y leyendo sin voz estos tiernos versos,

tu voz interna invade mis pensamientos, ilesa.

Magia para mis oídos

es tu voz concreta,

no la de otra mujer,

sino la tuya excelsa.

Ojalá pudiera alcanzarte,

ávida lectora.

Aún no es tarde

para terminar mi rima.

Todo lo que quiero

está en tu voz interna,

por cierto, voy a amarte igual…

solo si tú… lo apruebas.

*Vailaste: bailaste y velaste.|1.Algo más dulce: un bien más dulce que la voz de los músicos.|2.Retoños: tallos.